RIO DE JANEIRO

Después de pasar unos días en Ouro Preto nos marchamos para ir en dirección a Río de Janeiro.

Nuestro diario a vivir era algo como, llegar a un lugar, armar la carpa, comer algo y disfrutar y/o descansar dependiendo del sector que estuviéramos. Antes de marchar a Río de Janeiro nos fuimos a un pueblo llamado Lavras Novas, un pueblito no muy grande que se encontraba cerca de Ouro Preto, fuimos a visitar a Claudio, un viejo amigo de mi amigo Yerko, recuerdo que cuando llegamos fuimos a comer y conversar un poco de todo, luego llegamos a su casa en donde nos alojó un par de días, en ese lugar conocí la famosa Cachaza, un licor fuerte similar al agua ardiente, comimos empanadas y también compartimos con los amigos de Claudio donde sin duda fue un buen pasar por aquel lugar.

Una vez que nos fuimos del pueblo, llegamos a la carretera BR-040, la que daba dirección hacia Río de Janeiro, estando allí pasamos una o dos noches en una bomba de bencina en un sector llamado Conselheiro Lafaiete, lugar donde era muy común por nuestra parte llegar y ponerse hacer "dedo" o "autostop", nos levantamos muy temprano para hablar con los camioneros que se dirigían hacia Río, muchos nos dijeron que no, fue recién durante la tarde cuando logramos que un camionero nos llevará, no cabe duda que fue un momento de felicidad para nosotros.

Fueron aproximadamente 4 horas de viaje con alrededor de 300km de distancia, tuvimos la suerte de avanzar de un solo golpe donde fue un viaje provechoso e inolvidable.

Cuando llegamos a Río era tiempo de buscar algún sitio en donde armar nuestras carpas, sin dudas era algo complicado de conseguir en una ciudad como la de Río de Janeiro, caminamos demasiado ese día, luego de muchas opciones que no eran las mejores tomamos la desicion de buscar algún hostel barato, nos metimos a un callejón donde en un barrio donde podía pasar cualquier cosa, era un lugar sucio, con gente durmiendo en las calles, lleno de malucos y todo lo malo que puedes ver en un lugar como ese, nos adentramos en ese lugar pensando que habría algo barato, pero resultó ser todo lo contrario, no tuvimos éxito y tuvimos que salir de ese lugar, llegamos a la conclusión que debíamos salir de la ciudad de Río, ya estaba siendo un problema estar allí, nos fuimos al terminal de buses, prácticamente cruzamos toda la ciudad en un Ônibus donde pude ver la otra cara de Río, una ciudad mala, cochina donde en realidad no ves nada bueno, nada que ver con lo que ves en televisión para ir a vacacionar. Cuando llegamos al terminal de buses tuvimos que mirar el mapa para ver cual podría ser un lugar estratégico para pasar la noche, decidimos que Niteroi era el lugar al que debíamos ir, debíamos cruzar el puente de Río hacia el Norte. Niteroi es una playa donde estaba llena de botes pero que sin duda no había problemas para colocar la carpa ya que era un sector más o menos privado, para llegar allí había que cruzar por un cierto lugar donde vivían algunas personas, algo así como una comunidad, finalmente cuando ya eran las 22hrs, un día larguísimo para nosotros, recién en ese momento pudimos descansar y disfrutar de una maravillosa vista que nos daba a todo Rio de Janeiro.